Joan Llaneras es profeta en su tierra. El balear se proclamó campeón del mundo de ciclismo en pista cubierta en la modalidad de puntuación ante el delirio de los aficionados que abarrotaron el velódromo de la capital mallorquina.
Este triunfo sitúa al de Porreres en la leyenda. Ostenta siete entorchados mundiales, por lo que supera la marca de otro ilustre balear, Guillermo Timoner, que sumó seis 'maillots arcoiris' en semifondo tras moto en los años 60. Llaneras ha obtenido cuatro títulos universales en la prueba de puntuación y tres en americana (dos con Gálvez y el otro con Alzamora). Asimismo, cuenta en su palmarés con dos metales olímpicos, un oro en Atenas y una plata en Sydney, ambos en la modalidad de puntuación.
Pero el mallorquín ha sufrido lo inenarrable. El 26 de noviembre del año pasado acaeció un suceso que le marcaría de por vida. Se disputaban los Seis Días de Gante y Joan Llaneras e Isaac Gálvez saltaban al velódromo belga con la intención exhibir su categoría.
Gálvez pedaleaba a gran velocidad cuando, de repente, se vio involucrado en una caída tras colisionar con el belga Dimitri de Fauw. A consecuencia de este percance, el catalán chocó contra la valla exterior del anillo lo que, según la autopsia, le provocó la fractura de varias costillas. Su corazón y sus pulmones ser vieron gravemente afectados. A pesar de las maniobras de reanimación y de evacuación, en el Hospital Universitario de Gante únicamente se pudo certificar su defunción.
El fallecimiento de su compañero sumió a Llaneras en una profunda crisis. Por ello, tras proclamarse campeón mundial en Palma de Mallorca, descendían de su rostro emotivas y dolorosas lágrimas. La victoria se la dedicó, según sus palabras, "a quien todos sabéis". El de Porreres no se atreve a pronunciar su nombre. Y es que la muerte de su amigo Isaac Gálvez le ha marcado. El catalán, desde el cielo, seguro que sonrió al presenciar la gesta del heptacampeón mundial.
1 comentario:
Joan Llaneras ha demostrado lo grande que es compitiendo, pero también fuera de la pista. Lástima de ese cuarto puesto en Madison.
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