Para desdicha de 'la armada', se cumplió el guión previsto

El deporte no siempre entiende de lógica. Pero en esta ocasión se cumplió el guión. Estados Unidos ha hecho buenos los pronósticos y ha eliminado a España por la vía rápida en los cuartos de final de la Copa Davis.

Los encargados de abrir la eliminatoria el viernes fueron Tommy Robredo, número uno español, y James Blake, segunda raqueta estadounidense. El gerundense parecía partir con opciones ante un jugador al que había derrotado en dos de las últimas tres ocasiones en las que se habían visto las caras. El catalán salió centrado y disputó una primera manga muy sobria. Pero la pérdida de su servicio en el décimo juego del primer set acabó con sus esperanzas. El tenista de Nueva York, que se impuso por 6-4, 6-3 y 6-4, fundamentó su triunfo en su agresividad, en sus restos ganadores y en su implacable derecha, sin duda, una de las mejores del circuito.

Con la eliminatoria cuesta arriba, saltaron a la pista de Winston-Salem Andy Roddick y Fernando Verdasco. Emilio Sánchez Vicario, capitán español, optó por alinear al madrileño en lugar de a David Ferrer por su mejor adaptación, en teoría, a superficies rápidas como la de Carolina del Norte. El zurdo español empezó como un ciclón arrasando al tercer jugador del mundo, que daba síntomas de no hallarse al ciento por ciento, tras las molestias físicas que padeció en el Masters Series de Miami. Sin embargo, con 5-3 y servicio le tembló el pulso y perdió el juego. A partir de ahí, 'Fer' se hundió, sobre todo, después de ceder la primera manga en la muerte súbita. El jugador español desapareció de la pista y el de Nebraska lo aprovechó para vencer por 7-6 (5), 6-1 y 6-4, en buena medida, merced a su poderoso servicio.

Con 2-0 en la eliminatoria para los estadounidenses, el doble asomaba en el horizonte como una quimera, como una utopía. Este punto se sabía de antemano que sería para los hermanos Bryan. Y así fue. Aunque nos dejó un grato sabor de boca. La pareja formada por Feliciano López y Fernando Verdasco cuajó un choque de gran nivel y apunto estuvo de sorprender a la mejor pareja del planeta. Los zurdos españoles dispusieron de dos pelotas de break en el noveno juego del cuarto parcial, pero los gemelos californianos amparándose en su potente servicio las solventaron con éxito. Finalmente, Bob y Mike Bryan derrotaron a la pareja española por 7-5, 6-3, 3-6 y 7-6 (5).

Se cumplió, por tanto, lo previsto y España quedó apeada de la Copa Davis por un contundente y esperado 3-0. No obstante, Feliciano López y Fernando Verdasco dejan abierto un resquicio para la esperanza. Después de tanto buscar, puede que al final tengamos una pareja de ciertas garantías para afrontar los dobles.

Y es que preferimos pensar en el futuro, porque el presente del equipo español en esta edición de la Copa Davis ya no existe.