Europa se les queda pequeña. Rudy Fernández y Juan Carlos Navarro evidencian partido a partido que su periplo por el viejo continente se encamina a un próximo fin.
Consagrados como dos de los mejores escoltas europeos, sus retos en el baloncesto continental son ya escasos.
Rudy Fernández ocupa el 11º puesto en el ranking ACB y es el octavo anotador de la competición estatal. En la Euroliga, es el sexto mejor encestador y el décimo en valoración. El mallorquín, que explotó en Sevilla en la Copa del Rey de 2004, lidera al histórico Joventut de Badalona. Ostenta una gran capacidad atlética, posee un excelso lanzamiento exterior y se desenvuelve especialmente bien en transiciones rápidas. Se trata, sin duda, de una de las mayúsculas esperanzas del baloncesto español.
Juan Carlos Navarro, por su parte, se halla en el cuarto lugar en el ranking ACB y es el segundo cañonero del campeonato. En la Euroliga, es el octavo jugador más valorado y encestador. El catalán, integrante de la selección Campeona del Mundo Júnior en 1999, es uno de los grandes referentes del FC Barcelona y del baloncesto europeo. Jugador muy rápido y explosivo, se muestra letal en los uno contra uno y desde la larga distancia, merced a su mortífero lanzamiento.
Los dos escoltas de la selección española saben que su ciclo en Europa concluirá en breve. ¿Cruzarán este verano el charco para enrolarse en alguna franquicia de la NBA? A Rudy las previsiones le posicionan en primera ronda del Draft del presente año, por lo que su salto a la liga estadounidense es más que probable. El caso de Navarro es distinto. Los Washington Wizards, que le escogieron en la segunda ronda del Draft de 2002 (40º), poseen sus derechos. Pero su situación contractual y familiar puede tirar al traste su deseo. De cualquier modo, el sueño americano parece estar más cerca que nunca.
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